Quiero contarte una historia De esas que nunca se olvidan Una que guardaré en mi corazón por el resto de mi vida Comenzaría describiendo a la doncella de este cuento Pero siento que sería inútil pues las palabras no encuentro Para hablar de su hermosura no basta el abecedario Mejor mira hacia al espejo, te la encuentras siempre a diario Pues sí, ya la conoces, tiene un encanto innato Pero el protagonista la verdad es que no es muy guapo Es un chico un poco serio, o eso es lo que dicen muchas Quizás también lo conoces, lo sabrás mientras escuchas Dos días a la semana se dedicaba a escribir Historias y versos de amor que nunca llegaría a vivir Con un tipo de mujer que todavía no conocía Y su dolido corazón tenía fe que sí existía Sentía que en el amor su realidad era de días grises Pues espinas de otras rosas le dejaron cicatrices Pero como lejana estrella que él nunca podía alcanzar Tenía ese anhelo de mujer a quien quería llegar a amar Él buscaba encontrar una chica tierna y sincera Alguien en quien poder confiar por toda la vida entera Alguien que fuera sencilla, inteligente por supuesto Y que su personalidad la hiciera diferente al resto Y aunque muchos de esperar con el tiempo se cansan Él seguía por su camino sin perder las esperanzas De que al fin un día la llegará a conocer Y que sus sentimientos se puedan corresponder Él por sus asuntos recorría muchos poblados Ambientes muy distintos al que estaba acostumbrado Conoció a muchas mujeres, pero nunca la adecuada A la que él tanto buscaba ninguna se asemejaba Cambió de parecer, dio un descanso al romanticismo Pensó que si hay amor real este llegaría por sí mismo Pasaron muchas lunas, volvió a su pueblo natal Eran primeros días del año, se celebraba un carnaval Él salió con sus amigos a disfrutar del ambiente Lo que sucedió ese día nunca lo tuvo en su mente A lo lejos pudo ver un rostro que ya conocía Alguien que ya miró en sus sueños o en lo que tanto escribía Era una atracción muy fuerte, no dejaba de mirarla Pero no quería acercarse, tenía miedo a incomodarla Pero se decidió, se acercó y le dio un saludo Y aunque moría de nervios resistió con lo que pudo Esas escasas milésimas de segundo se hicieron eternas ¿Me ignorará?, ¿se enojará? Eso y más dudas pensaba al verla, pero La chica fue muy amable, le respondió a su saludo Pero hablaron poco tiempo pues quedarse más no pudo Ya era demasiado tarde y ella se tenía que ir Pero para el siguiente día juntos planearon salir Llegó el amanecer, el chico mucho lo esperaba Pues desde el primer instante solo en la chica pensaba Habían acordado verse esa noche en la plaza Pero este era un lugar muy distanciado de su casa Tuvo problemas para ir, en llegar mucho tardaba Y en esa fecha el carnaval todavía se celebraba Había demasiada gente, música por doquier Pero a aquella bella mujer todavía no lograba ver Pensó que ella no iría, que lo dejó plantado Pero miró que una silueta lo llamaba desde un lado Para poder mirar mejor se acercó un poco más Era aquella linda chica, pero con un antifaz El alma volvió a su cuerpo, estuvo otra vez contento Pues ya por muchos años esperaba este momento Tener frente a sus ojos a la reina de sus sueños Era tan maravilloso como algún día ser su dueño ¿Pero cómo lograrlo? Pues parecía una fantasía La melodía más hermosa era todo lo que decía Ya no importaba la Luna, lo alumbraba su mirada Las estrellas parecían feas comparadas con su cara No quería apresurarse como en las veces pasadas Hablaron de la vida, de la forma en que pensaban De sus aspiraciones, de las metas por cumplir "Esta es la chica indicada" el joven pudo sentir El tiempo no ayudó, la noche pasó volando El Sol quiso ser testigo de lo que estaba pasando Otra vez llegó el momento de la despedida Y ella tenía que viajar, no podría haber otra salida Pero antes de marcharse prometieron escribir Pues la distancia no es motivo para el amor prohibir Enviar cartas cada semana, nunca perder el contacto Con un beso en la mejilla ellos sellaron aquel pacto Las fechas pasaron, el sentimiento aumentaba Las cartas ya no bastaban para el amor que se forjaba Planearon un reencuentro, a los dos meses pasaría No dejaba de soñar cuando a sus brazos volvería Y así pasaron los días anhelando aquel gran viaje Si el amor es el camino, extrañar es el peaje Sabía que todo tenía un precio, pero eso no le importó La distancia no arruinaría lo que el corazón sintió Llegó aquel martes esperado, él tomó rumbo a su ciudad Más de siete días viajando no le dio incomodidad Solo pensaba en sus ojos, en apreciar aquel brillo Y en que darle primer beso no iba a ser algo sencillo Buscó la dirección que aparecía en el buzón Lo llevó a un barrio lujoso y a una bonita mansión Él se acercó a la puerta, lo atendieron los sirvientes Lo invitaron a pasar y que en la sala se siente Pasaron muchos minutos, una dama se acercó Era mayor y similar a la chica que conoció Se notaba un poco triste, aunque lo saludó con gusto Le dijo que había llegado en el momento más justo Que no sabía cómo esta noticia iba a tomar Y que le prometió a su hija no la iba a delatar Pero dadas las circunstancias era la mejor opción Contarle la verdad detrás de esta situación Le comentó que la chica fue diagnosticada Con una enfermedad que no podía ser curada Que nunca se lo dijo por la simple razón De que no quería que él le escribiera tan solo por compasión Le contó que en el carnaval ella tuvo que partir A realizarse un tratamiento que quizás podía servir Lamentablemente nada le dio resultado Y con el pasar de meses tan solo empeoró su estado Los médicos pronosticaron poco tiempo de vida Y esa fecha era quizás aquella de la despedida Él inmediatamente pidió poderla mirar La señora aceptó y al cuarto lo dejó entrar La observó recostada en su cama Su rostro tan hermoso, tal como él lo recordaba Tomó sus suaves manos, ella los ojos abrió Vio aquel brillo en su mirada que tantas noches soñó Ella le pidió disculpas por no ser honesta Dijo que por su situación quiso evitar malas respuestas También le agradeció por sus cartas y poesías En noches de enfermedad fue su mejor compañía Y este día que ella se sentía tan mal Tenía ganas de escuchar un poema final Por eso este cuento de amor es el que le estoy narrando Nunca te olvidaré e igual te seguiré amando Hay amores destinados a encontrarse Pero que no están destinados a estar juntos