Para cantarte solo encontré Palabras que no dicen nada Tan solo pude enumerar Algunas de las cosas que aún extraño Y es que yo no sé, que será hoy de vos Tan lejos que ya ni recuerdo De tu mirar, más que el color Esa manera tan distante Y esa graciosa forma de andar Las cosas que decías, tu sonrisa Y el sonido de tu voz, recordé En esta noche que hoy comienza a amanecer Para nombrarte en zamba, yo elegí nombrarte así Con todos los recuerdos buenos Los sueños que tuvimos, los hijos que soñamos Las horas que pasábamos tan juntos Descubriéndonos, en la piel Amor capullo que no pudo florecer Tus manos fueron, dueñas del pan Y dueñas del amor pecado Harina y sal, fuego y sudor Las brazas encendidas del deseo Consumiéndonos, y yo estoy Tan lejos de tu pensamiento Eran los días, de oscuridad Y tu ternura militante Llenabas todo de humanidad Soñabas con un mundo diferente Libertad y pan, y en tu fe Tuve coraje y entonces también luché Para nombrarte en zamba, yo elegí nombrarte así Con todos los recuerdos buenos Los sueños que tuvimos, los hijos que soñamos Las horas que pasábamos tan juntos Descubriéndonos, en la piel Amor capullo que no pudo florecer Descubriéndonos, en la piel Amor capullo que no pudo florecer