Lo que la vida se olvidó de repartir Está en tus manos Porque no es cierto que la vida pase así Sin avisar Después el árbol se cayó Y nunca se quebró Y la armonía de la tarde vislumbró la fe En la rutina del dolor Seguramente anda la vida Para que uno pueda explicar Lo que imagina Enajenado sin saber Casi embrujado, sin querer El alma se despliega por ahí Está en tus manos Tan simple así Solo en tus manos Está el camino para empezar a vivir Solo en tus manos Tan simple así Solo en tus manos Está el camino para empezar a vivir