Siempre pensé que la envidia Era un sentimiento errado Y de repente, mi vida, ay De envidia se me ha llenado Le tengo envidia a la noche Noche que vela tu sueño Le tengo envidia y quisiera ser De la noche y de ti, dueño Le tengo envidia a la lluvia Que te acaricia y te moja Y tengo envidia del viento Que te besa si se le antoja Siempre pensé que la envidia Era un sentimiento insano Y de repente, la envidia y yo No nos soltamos la mano Le tengo envidia al silencio Cuando te quedas callada Le tengo envidia, pues quiero ser De ti, feliz carcajada Le tengo envidia a la noche A la lluvia y al viento Y al fin de cuentas hoy comprendí La envidia, ay, qué bello sentimiento Al fin de cuentas hoy comprendí La envidia es un bello sentimiento