Sé que te acuerdas, Celia, de tu columpio El que colgabas de las estrellas Sé que te acuerdas, Celia, de un amor limpio De días soleados, de noches bellas Y te aplaudo que te olvides de tantas cosas Pues la vida a ti te dio más espinas que rosas Te celebro que de las penas vivas ausente ¡Bravo, madre! Déjame darte un beso en la frente ¡Ay, Celia! Sé que te acuerdas, Celia, aún de tus hijos Cuando me miran tus ojos fijos Sé que te acuerdas, Celia, de tu rebozo En que envolviste a este mocoso Y mi boquita infantil sobre tu seno Te aseguro, nunca probó un manjar más bueno ¡Ay, Celia! Y cuando brillan, Celia, tus ojos parcos Sé que te acuerdas aún de Marcos Cuando traía tu hombre, de amor, velices Sé que recuerdas días felices Y te admiro que de lo malo siempre te olvides Me imagino, porque a los cielos por él aún pides ¡Ay, Celia! A la vida te agradezco, y le haría un reclamo Si olvidaras un día, madre, cuánto te amo