Si me matan o me muero de algo dejaré una carta dirigida a ti pa' que sepas aunque tarde mi alma que jamás debiste tu dudar de mí. Si por algo me llevarán preso te estaré adorando desde mi prisión y en mi celda escribiré tu nombre con la misma sangre de mi corazón. Si la muerte me la dieras tú con desprecios de tu corazón si la cárcel me la dan tus brazos no habría prisionero más feliz que yo. Si me embarco por lejanas tierras y por largo tiempo no te vuelvo a ver donde quieras que te encuentres mi alma estaré pensando siempre en tu querer.