Los que nunca han querido los que nunca han amado ya no están conmigo desde que tu olvido me dejó llorando. El mejor barrilete que yo tuve en las manos en aquel domingo al cortar el hilo se me fue volando. Los que no me comprenden y se van de mi lado no conocen de amor de dolor ni de llanto. Y yo sigo pensando que el sabor de tus labios era un barrilete que en aquel domingo se me fue volando. Los que se han convencido que el amor ya no existe dicen que tu olvido no es ningún motivo para verme triste. A pesar de estar vivo no levanto los brazos porque tu partida me dejó la vida hecha mil pedazos.