Pudiendo ser oblicuo y pendenciero En su insolito mundo ajedrezado Nunca participo del entreviero Ni siquiera comiendo de costado. Prefirio la quietud de un casillero Donde irónico juego, le fue dado, Él que busco ser libre en el tablero Se vio en un laberinto confinado. Fue entonces que ataco Y quedo pagando No vio esas piezas blancas Aguardando Y enfurecido Se largo al combate... Lo dejaron venir, Lo acorralaron, De movida nomás lo enchalecaron, Y en el borda le dieron jaque mate