Volveré del otoño de mis horas Al madrigal de la primavera que nace en tu boca Y dejaré eternamente el último ápice de aliento Para decir te quiero una vez más Y después retornaré a tu mirada Para ser feliz eternamente Quiero ser la luz de tu mirada al despertar Quedarme en tus ojos dentro de tu corazón Para nombrarte con mi voz Y no sentir nunca el adiós Saberte mía, mía Para nombrarte con mi voz Y no sentir nunca el adiós Saberte mía, mía Quiero ser el lirio que a tu puerta da la flor Y velar tus sueños sobre aquel beso total Sentirme dentro de tu piel Enloquecer por tu querer Por siempre mía, mía Para nombrarte con mi voz Y no sentir nunca el adiós Saberte mía, mía Si yo pudiera detener a nuestras vidas En una noche sin apuro y sin regreso Nunca quisiera despertar Porque la vida se nos va Y solo muero, muero Nunca quisiera despertar Porque la vida se nos va Y solo muero, muero