Pasaditas las dos de la mañana Fuera la frazada, ya se despertó Entre el revolver debajo de la almohada Y la lagaña bostezó una canción Puso la pava, para hacer un par de ellos Por la ventana, la musa asomó Sencillo un grillo le silvaba un estribillo Fuente de luz, y de inspiración Fue tejiendo las palabras una a una Con la ayuda de la luna que vigila desde aquel rincón Hizo las pases con el tono en la guitarra Y la garganta se afiló tosiendo un sol mayor Cantó en la ducha, ahí donde nunca nadie escucha Y con su bella melodía, el día se le apareció Regó las plantas hasta el techo, pa'después sacar provecho Y convidarles de su pecho, ante cualquier bajón Se fue silvando Por la vereda A la vieja estación Y ahí se sienta Y ahi espera Un viento suave y burlón Que lo saque del callejón