Alabado sea el niño que ha nacido en un portal, su padre es un noble obrero, su madre es pura bondad. Alabado sea el niño que no tiene camisón, que no conoce la leche y por un pan es ladrón. Y por ellos quiero yo al cantar esta canción que nuestras manos se unan al ritmo del corazón. Alabado el prisionero que ha sufrido con dolor toda clase de torturas y a su hermano no vendió. Alabadas las Marías que están en el mundo entero bordando nuestras banderas tras la cual juntos iremos.