Del norte vengo, Maruca, a cantarle al niño Dios. Mi mamá mandó saludos pa' don José y para vos. Como yo no tengo burro me he venido caminando. Cuando lo supo la luna feliz me vino alumbrando. La salitrera norteña me ha mandado a saludar. He caminado tres noches con luna y sin descansar. Tengo ganas de llorar porque me tengo ir. Llegué sin nada en las manos pero vi al querubín.